Buscar

domingo, julio 02, 2006

limón verde, amarillo, pero sobretodo ácido

Juego con el tiempo mientras le saco el jugo a un limón imposible...
como cuando en Vértigo bailé para mí y nada importaba. Sabía, al mismo tiempo, que me veían.

Que me vean. No me molesta. Igual nunca se acercan x mis vibras intimidantes.

Ya el limón se ha rendido, no dará ni una gota más de ácido. No importa, eso es suficiente.

Algo parecido a una cucharadita del jarabe de uva para la tos se desliza por mi lengua, recorre mi boca, y, mientras mis ojos se cierran, siento una fuerza conocida en en fondo y hacia abajo, la salivación ha comenzado y me estremezco... me encanta la sensación del ácido en mi boca.

Es algo parecido a como cuando como las gomitas ácidas, sobretodo las de manzana, esas que son como una llanta desinflada, mitad blanca, mitad verde... ojalá no se acabaran nunca...

Creo que se asemeja a 4 palabras juntas que, en el momento, disimulás no entender, no les das importancia, pero sabés que algo provocaste, sin quererlo, sin medirlo, sin casi necesitarlo...

Usted me pone nervioso.
Esa fue la frase...
Otro limón en mi boca. Pero ese no me lo comí, sólo saborié la inocencia personal...
¿porqué?
jaja! obvio, no me contestó eso...

3 comentarios:

Cristibel dijo...

El ácido es mi segundo sabor favorito... después del dulce, y el tercero: el agridulce. Por qué será?

Dis - frúta - te.

akxi dijo...

dulce-acidito es lo mejor :P

El joven viejo dijo...

ácido tentador... inversamente masoquista.